Del 3 al 13 de abril, el desierto del Sahara acogerá el Sultan Marathon des Sables, competición de autosuficiencia alimentaria que este año celebra su 30º edición. Más de 1.350 corredores, provenientes de medio centenar de países de todo el mundo, competirán en una carrera de autosuficiencia, en la que deberán llevar su propia provisión de alimentos. Durante 6 días recorrerán unos 250 kilómetros y deberán atravesar dunas, djebels, ergios y lagos secos para llegar a la meta
Patrick Bauer, fundador y organizador del Marathon des Sables, daba algunas claves de la prueba en su presentación en Barcelona: “Lo más importante es la gente que forma parte del Marathon des Sables, su pasión por la prueba” y su ilusión por compartir esta experiencia con el resto de compañeros que corren día a día por lograr alcanzar la meta. A lo que añade: “Para mí es un regalo de la vida poder celebrar la 30º edición de esta prueba”, que se disputará en el Sahara de Maruecos.
El compañerismo, el alma del Marathon des Sables
La rueda de prensa ha contado también con el testimonio de algunos de los españoles que han participado en dicha prueba a lo largo de su historia. Entre ellos destaca la experiencia explicada por Jordi Solé, miembro de Compressport, que participó en la prueba en 2011. “Se trata de una experiencia única e irrepetible, donde la solidaridad, la ayuda, la disciplina y la humildad son el día a día. Es una prueba dura. quizás es la más duras de todas las competiciones que he participado, sobre todo por las altas temperaturas, por las llagas y por el hambre que pasas, puesto que en la mochila no puedes llevar mucho peso.
En la misma línea se ha mostrado Javier de las Muelas: En el Sultan Marathon des Sables “te das cuenta de lo que significa la vida. Algo que recuerdo mucho de esta experiencia es la humildad y todo el cariño que recibes de la organización”. Y concluye: “Llegar a la 30º edición es alo único en una aventura de este tipo”.
Pepe Navarro y Xavier Piedra participaron juntos en la edición de 2008. Navarro ha afirmado que, en el Sultan Marathon des Sables, “pones tu cuerpo y tu mente a limites que no te pensabas que podías llegar. Te das cuenta de que la cabeza es lo que marca la diferencia. Corría 7 horas cada día y el compañerismo y el buen rollo marcan la diferencia. La aventura no es llegar, sino llegar en condiciones. Necesito volver para confirmar a mí mismo que aun puedo hacerlo”. Piedra, por otro lado, ha comentado que “puedes disfrutar mucho de la carrera”, de los paisajes y, sobre todo, “del compañerismo”. “Sufrimos mucho durante la competición, pero también lo pasamos muy bien”. Tras el Marathon des Sables, “nuestros vínculos se han estrechado todavía más”:
Carles Portavella, de la "Vida es Chula", ha declarado “no considero este maratón como una carrera. Es una experiencia”. Según Portavella, esta vivencia se fundamenta en 3 pilares básicos: la gestión de las provisiones, el entrenamiento y la mentalidad, puesto que la cabeza es lo más importante. O se tiene o no se tiene”. Y ha concluido que lo recuerda con más cariño es llegar a la meta y encontrarse con “el beso y el abrazo final de Patrick Bauer”, muestra de afecto que recibe cada uno de los finisher.
A modo de conclusión ha intervenido Chema Martínez, español que participará en esta edición. “Esta carrera ha significado mucho para mí desde que era pequeño. Este año voy a tener la oportunidad de competir y estoy muy ilusionado y con muchas ganas de correr en el desierto. Será una semana increíble y estoy con muchas ganas, como un chaval. Espero vivir una experiencia diferente. Ilusión, ganas, pasión”.
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