La undécima jornada de la División de Honor Plata de Balonmano ha vuelto a traer doble victoria para el deporte de Andalucía. Tanto el Zumosol Palma del Río como el Meridiano Antequera han ganado sus partidos a domicilio, lo que mantiene a los cordobeses en la cuarta posición mirando hacia arriba y hace respirar al Meridiano Antequera en la lucha por la permanencia derrotando a un rival directo. 25-29 ganó el ARS en Zarautz y 28-30 el Meridiano Antequera en Barakaldo.
En Zarautz, el equipo de Andrés Rey tuvo un encuentro muy igualado que no se pudo romper hasta los últimos cinco minutos. La solidez defensiva del Zumosol Palma del Río fue la clave, así como el acierto en la portería en los momentos importantes. Parecía que el 10-12 con el que se llegó al descanso era el inicio de la ascensión palmeña, pero todo lo contrario, Amenabar salió con ambición en la segunda parte y llegó a ponerse por delante (19-19 min. 45). Ahí fue cuando el Palma volvió a ajustar su defensa para llegar al 25-29 final con una gran aportación ofensiva de Diogenes Cruz con once goles.
Primera victoria a domicilio del Antequera
El Meridiano Antequera consiguió en Barakaldo su primer triunfo a domicilio de la temporada. Ha ganado 28-30 en la cancha de Lasesarre ante un rival directo y se sitúa con 10 puntos en la clasificación tras 11 jornadas disputadas. En un partido muy serio desde el primer minuto, siempre mandando en el marcador y con Bertos tirando del carro ofensivo, los de Lorenzo Ruiz dan un golpe de autoridad y demuestran su progresión.
Ni cinco minutos tardaron los antequeranos en abrir brecha en el marcador con un potente ataque y apoyados por el meta Francisco Maireles para poner el 1-4. El técnico barakaldés se vio obligado a solicitar su primer tiempo muerto cuando apenas habían transcurrido los nueve minutos; se aumentaba la renta con el 1-6. Fue en el ecuador de la primera mitad cuando los locales presentaron síntomas de recuperación para llegar al descanso reduciendo la renta (12-13) y el Meridiano se fue con dudas al vestuario.
Cuál sería la fórmula mágica que utilizaron los técnicos durante el descanso para que los verdes volvieran a repetir lo que fue el comienzo del encuentro con la misma energía. El Barakaldo redujo diferencias en el minuto 45 de partido poniendo el 20-22, pero el Meridiano actuaba por mazazos, que gracias a los cambios en el banquillo, siempre había energía para irradiar en la pista. Pasaron cinco minutos y se volvió a disparar la renta que el Meridiano mantuvo hasta los últimos actos (23-28), donde la irregularidad marcó el final del encuentro con algunas pérdidas de balón que sirvieron para maquillar el resultado final.
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