Cuando el partido parecía que estaba ganado a falta de 29 segundos con ventaja de cuatro a favor del Unicaja y en la prórroga, el CSKA de Moscú terminó remontando el partido para imponerse 75-76 en la novena jornada de la Euroliga.
El equipo de Joan Plaza salió con el cuchillo entre los dientes, queriendo demostrar que quien quisiera ganar en el Carpena tendría que sudar bastante. El equipo malagueño, liderado por un poderosísimo Vladimir Golubovic (8 puntos, 8 rebotes y 19 de valoración) puso tierra de por medio con el millonario equipo ruso. El marcador era de 17 a 6 en el minuto 7 de partido. En los 3 minutos restantes del cuarto el equipo malagueño pudo mantener a los mocovitas a raya y finalizar el período con 20 a 11.
Nando De Colo apareció en el inicio del segundo, el ex NBA cogió la responsabilidad de su equipo en ataque, pero el Unicaja no bajaba el ritmo. Ahora era desde la línea de 3 puntos donde el Unicaja estaba acertado. Tres triples (Green, Vasileaidis y Suárez) dejaban la ventaja por encima de la decena e incluso tras dos acciones de Granger conseguía los 16 puntos de ventaja (38-22 m.18). Esta diferencia se pudo mantener hasta el paso de los vestuarios (43-27).
Tras el paso por los vestuarios el Unicaja parecía que seguiría con el nivel de acierto de la primera parte. El Carpena veía como los suyos conseguían alcanzar los 20 puntos de ventaja cuando un triple de Vasileiadis ponía 51 a 31 el partido, corría el minuto 24. Pero en este momento despertó el conjunto ruso, de nuevo con De Colo protagonista. El base francés asumió galones y anotó y creó para sus compañeros, aunque el Unicaja conseguía aguantar durante algunas acciones. A partir del 56 a 39 los malagueños se colapsaron, con mucho mérito de la defensa intensísima del equipo del "Ejército Rojo". Hynes reboteaba en ataque y Weems golpeaba desde el triple. Con estos componentes los rusos se ponían 56 a 49 a falta de diez minutos que no serían nada fáciles para un Unicaja que parecía golpeado y sin reacción.
El último cuarto tuvo dos fases diferenciadas, una primera dominada por el CSKA para ponerse por delante con 58 a 60, y otra muy distinta a partir de este momento, minuto 34. La tensión, las defensas, los choques... eran los protagonistas de lo que sucedía en el parquet. El equipo malagueño podía no estar acertado, pero a corazón y casta pocos equipos le pueden igualar. Cargando el rebote, tocando cada balón en defensa, los de Plaza consiguieron parar el parcial ruso y entrar en los dos últimos minutos con 66 a 62. De Colo acercó a los suyos a 2 puntos y a falta de 25 segundos Weems empataba el partido a 66, marcador con el que se llegaría a la prórroga.
Podría parecer que la mayor profundidad de banquillo del CSKA sería definitiva tras un partido tan duro, pero el Unicaja no renuncua nunca al cuerpo a cuerpo, compite ante quién sea. Kostas Vasileiadis lograba poner el partido 70 a 68 a falta de dos minutos para el final de la prórroga, pero Fridzon a falta de minuto y medio ponía a los suyos con un triple 70 a 71 arriba. El partido estaba complicadísimo, pero una canasta de Thomas y un robo en defensa que propició una técnica a Weems por hacer un gesto a la grada de cabreo por perder el balón le daba una nueva oportunidad al Unicaja. Vasileiadis anotaba 1 tiro libre y en la posesión tras la técnica, cuando parecía que se perdía la bola, Fran rescató un balón para anotar a tablero y poner 75 a 71 el partido a falta de 29 segundos.
Muchos pensarían que estaba todo hecho, pero ante el CSKA Moscú hasta el "rabo todo es toro", que diría el castizo. De Colo obró el milagro ruso. El francés primero anotó en bandeja y a falta de 6 segundos consiguió un 2+1 que sería definitivo. Los malagueños tuvieron una posesión pero la suerte no sonrió en esta ocasión.
Foto: Baloncesto Unicaja
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